Reseña: TRON: Legacy

TRON: Legacy (USA 2010)

Director: Joseph Kosinski

Reparto: Garrett Hedlund. Olivia Wilde, Jeff Bridges, Bruce Boxleitner, Michael Sheen, Beau Garret

Guión: Adam Horowitz, Adam Kitsis

Duración: 127'

TRON se estrenó en 1982 y fue un fracaso rotundo a pesar de contar a la todopoderosa Disney como productora y a una estrella como Jeff Bridges como protagonista. Sin embargo, cuando en los 90s la informática e Internet se hicieron más populares y pelis inspiradas (en mayor o menor medida) en ella como Akira y Matrix se convirtieron en pelotazos, se fue convirtiendo en toda una cinta de culto. Ahora en 2010 nos llega su secuela, TRON: Legacy, que sin ser tan rompedora como la original, es mejor peli y, desde luego, está teniendo un éxito mucho mayor.

"Grandes efectos digitales pero una historia vacía". Esta frase la escuchado repetida como si fuera un mantra en los últimos días referida a TRON: Legacy. Pero no por repetir algo mil veces se convierte en verdad y lo cierto es que la historia, sin ser una maravilla, cumple a la perfección: es interesante, se puede seguir sin necesidad de haber visto la original (y se disfruta más si se ha hecho, porque tiene muchos guiños), plantea unos personajes interesantes y deja un final con muchas posibilidades: puede ser cerrado si la peli no es un éxito y puede ser abierto si, como está pasando, se convierte en un pelotazo y se plantea una continuación. Es cierto que hay un problema de ritmo en algunas partes pero yo lo achaco más a la labor del inexperto director Joseph Kosinski [1] que al guión.

Eso si, Kosinski se pierde con el ritmo pero se luce con las escenas de acción: la lucha de discos, la pelea de motos de luz, el ataque a la discoteca, la persecución aérea... todas son espectaculares y se ayudan de unos efectos digitales realmente espectaculares. La Red es un prodigio que se apoya en una grabación en 3D con unas cámaras una generación por encima de las que usó James Cameron en Avatar pero, incluso por encima de la espectacularidad mostrada en la creación de La Red, está la maestría alcanzada por el software de envejecimiento-rejuvenecimiento usado en El Curioso Caso de Benjamin Button y que aquí permite un Jeff Bridges de 30 años como extraordinario villano de la función [2].

En cuanto a los actores, están todos correctos y, quizás destacando un poco por encima, un desbocado Michael Sheen, totalmente alejado de su papel arquetípico de Tony Blair. El chaval protagonista, Garrett Hedlund, no desentona mientras que Jeff Bridges está tan bien como de costumbre y Olivia Wilde, aunque parezca mentira, no está creada por ordenador sino que es de carne y hueso. A destacar también los cameos de Daft Punk (autores de la tremenda banda sonora) y de un Cillian Murphy sin acreditar, cuyo personaje tiene toda la pinta de ser el malvado en una posible tercera entrega [3].

En definitiva, un entretenimiento de calidad que te dejará clavado en la butaca en muchos momentos y que los informáticos y los que hayan visto la primera parte disfrutarán todavía más.

Nota: 8.5 / 10

Un saludete guap@s.

[1] Cuya segunda peli será otro remake de otro fracaso Disney de los primeros 80s: El Abismo Negro.

[2] Este software debe costar una pasta porque el personaje joven de Bruce Boxleitner (Tron) sólo sale a cara descubierta un par de minutos. El resto de la cinta, con un casco negro.

[3] De hecho es el hijo del malvado de la primera parte.