Semana de series XXVI: Lost Special Edition

¡Cuidado! Achtung! Warning! Spoilers!

Lost 6x09 - Ab Aeterno

Crear una mitología compleja y una historia atrayente que se nutra de ella y luego ir mostrándola detalle a detalle es algo realmente meritorio. Pero, en base a una serie de detalles inconexos en un principio, conseguir crear una mitología coherente resulta un merito aún mayor. Y eso es precisamente lo que están consiguiendo Lindelof, Cuse y todos sus guionistas. Un claro ejemplo es este 6x09 donde dos elementos tan dispares como la Roca Negra en medio de la selva y la estatua derruida encuentran un origen común y perfectamente pausible: Jacob provoca un tsunami que lleva a la Roca Negra hasta la selva llevándose por medio la Estatua salvo el pie de cuatro dedos (lástima que el presupuesto de la serie ya no sea el de la primera temporada y la escena haya sido tan de otra época).

En la Roca Negra, velero capitaneado por Magnus Hanso (Dharma todavía tiene que dar que hablar en lo que queda de serie), viaja, como era de esperar, Richard. Mejor dicho: Ricardo. Porque el señor Alpert resulta ser canario (de El Socorro, isla de Tenerife, concretamente) y un condenado a muerte por matar accidentalmente al doctor que no quería darle la medicina para salvar la vida a su mujer, salvado de la horca por sus rudimentarios conocimientos del inglés. En vez de morir termina encadenado en un barco naufrago en El Infierno. O por lo menos eso es lo que le dice el Hombre de Negro. Primero, como Humo Negro, le salva de la muerte a manos de uno de los oficiales del barco; luego, convertido en su esposa muerta Isabella, le confunde; y finalmente, ya como Hombre de Negro, le salva y le convence para que vaya a la Estatua y mate al demonio (con las mismas palabras y la misma daga que Dogen le da a Sayid ciento cincuenta años después y dos capítulos antes).

Ricardo es menos poderoso que Jacob y no lo puede matar. Este le convence de que ni está muerto ni está en el Infierno con un bautismo un tanto violento. Luego le explica sobre La Isla y el Hombre de Negro con un simil con una botella de vino: él es el Mal y la Isla la barrera, el tapón, que le separa de poder expandirse, derramarse por el mundo, una especie de Muro de Adriano. Jacob es el guardian del Muro, el carcelero del Mal... y cuando él no esté, otro le sustituirá. Jacob le propone ser su enlace con todos los que vayan llegando a La Isla, entre los que se encontrará su Sustituto. A cambio Ricardo recibirá un regalo: la inmortalidad.

Ricardo vuelve al lugar donde había dejado al Hombre de Negro y le entrega el obsequio de Jacob: una piedra blanca que ya todos bien conocemos. El Hombre de Negro lamenta que Ricardo haya escuchado a Jacob pero le dice que su oferta (marcharse de La Isla y poder ver a su mujer de nuevo) todavía sigue en pie... y como demostración le entrega el colgante de su mujer. Muchos años después, con Ricardo convertido en Richard y sintiéndose engañado por Jacob vuelve al lugar de su entrevista con el Hombre de Negro, desentierra el colgante de Isabella y grita que quiera aceptar la oferta... pero el que aparece no es BadLocke sino un Hurley cada vez más en plan Whoopy Goldberg que le trae un mensaje de su amada Isabella: debe acabar con el Hombre de Negro o irán todos al Infierno.

Varias cosillas:

- Si Jacob está muerto y su sustituto todavía no ha sido elegido, ¿qué le impide a BadLocke salir de La Isla?

- ¿Qué el capitán de La Roca Negra fuera Magnus Hanso indica que los Hanso ya buscaban La Isla desde antes de Dharma o fue a partir de la desparición del barco cuando empezó la búsqueda? De Dharma y el clan Hanso todavía queda bastante por contar.

- Que, con el montón de detalles que tiene el episodio, lo más comentado por la blogosfera sea el nefasto acento canario de Nestor Carbonell muestra a las claras el nivel de puerilidad, frivolidad y falta de sustancia que hay por estos lares.


Un saludete guap@s.