20 abr 2006

Crítica: Alien, el octavo pasajero

ALIEN, EL OCTAVO PASAJERO (Alien, USA/UK 1979)
Director: Ridley Scott
Reparto: Sigourney Weaver, Tom Skerrit, John Hurt, Iam Holm, Harry Dean Stanton
Guión: Dan O'Bannon, Ronald Shusett
Duración: 117'


Este humilde servidor de ustedes había visto Alien 3, Alien Resurrection e incluso Alien Vs. Predator pero increiblemente ni había visto Alien ni Aliens, las dos primeras y, supuestamente mejores, entregas de una de las más grandes sagas de ciencia-ficción y terror de la historia. He decidido enmendar mi error y ya he visto la peli de Ridley Scott y en los próximos días voy a ver la de James Cameron.

La segunda película del bueno de Ridley Scott me ganó desde el principio: durante los primeros minutos vemos la nave Nostromo en mitad de la soledad del hiperespacio, los vacios y axfisiantes pasillos y estancias de la nave y como los siete miembros de la tripulación de la nave comercial despiertan de su estado de hibernación. Todo esto sin una sola palabra. Fantástico.

A partir de ahi llegan los dialogos y nos enteramos de la historia: la tripulación ha sido despertada por la computadora central de la nave (la inquietante Madre) no porque ya se encuentren cerca de La Tierra sino porque ha recibido una señal que podría ser de auxilio. Cumpliendo con las leyes interestelares los tripulantes deciden ir en busca de la señal y aterrizan bruscamente en un arido paraje. Tres de los miembros de la tripulación deciden ir a echar un vistazo y cuando vuelven uno de ellos tiene a un viscoso ser extraterrestre alrededor de su cabeza. A partir de este momento es cuando la cosa se pone chunga y la teniente Ellen Ripley empieza a adquirir protagonismo.

La película tiene un ritmo fantástico y esta sazonada de escenas realmente antológicas: la tranquila cena prehibernación que termina en la explosión del pecho de Kane; la pelea entre Ripley y Ash cuando descubre los malvados planes de este; el descubrimiento de una Ripley en bragas y camiseta de tirantes del alien tranquilamente dormido en un rincón de su nave; la muerte de Brett....

En definitiva, una gran película, realmente angustiosa, que mezcla a la perfección ciencia-ficción y terror y que me arrepiento enormemente de haber tardado tanto en ver.


Curiosidad: En la escena de la explosión pectoral, ninguno de los actores salvo John Hurt sabían lo que iba a a ocurrir por lo que sus expresiones de asco son totalmente genuinas.

Lo mejor: los primeros minutos, el alien, Sigourney Weaver.
Lo peor: que a Ridley Scott se le haya olvidado hacer películas como esta.

Nota: 9/10

3 comentarios:

  1. Un 10 tio! Es una película imprescindible! Scott ha olvidado tantas cosas... menos mal que tenemos al hermano que siempre ha sido un gamberrete y no se sale de esa línea!

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  2. Pues no le he puesto un 10 por el gato, no me gustan los gatos jejeje

    Un poco demasiado gamberro el amigo Tony aunque es verdad que nos ha dejado algunas películas muy buenas.

    Saludos.

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  3. Anónimo10:30 a. m.

    Una de mis escenas preferidas de "Alien" es cuando aparece la Weaver en bragas y con camiseta imperio, tremenda dosis erótica frente al mortífero Alien.

    Cuando veas "Aliens", quizás coincidas con migo en interpretarla como un gran western. Los aliens son los indios y los colonos el Séptimo de caballería defendiendo el Fuerte. Ni el mismísimo John Ford lo habría hecho mejor.

    Salud!!!

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